entre esquina y esquina te busque, esperando encontrar lo que perdi
esa parte de mi, que fue sin vos, con vos, conmigo

por jugar a ser picaflor se ahogo en el nectar de saciar su vacio entre un par de piernas, son historias que tiran sal a las heridas que despiertan. Estoy que lluevo y doy fe que con mi mestruación puedo saciar la sed de una legión de mil vampiros, no es que ande histerica pero la revolución de hormonas me deja tirando descargas no se lo tome mal, que hoy ande con esta cara. toda luna marca un ciclo y cierra circulos, estoy esperando hasta luna nueva para desenraizar todos esos pensamientos negativos que son autodestructivos y no sirven para nada, sé que soy demasiado joven para conocer ese artilugio del corazón que hecha los recuerdos malos y magnifica los buenos, para no guardar rencor que marchite, porque la yama purifique y arda. Muchas veces se sufre más con los pensamientos que con los sentimientos ahi esta nuestro gran error, ante una duda hay que preguntar hablemos lo que haya para decir que el callarnos nos pone feos, mantengo correspondecia logica entre ideas y comportamiento. Estoy piola pero ¿ sabes que es lo que me incomoda? que todavia me tiemble la garganta y me cambie la voz, cada vez que hablo de vos. La vida se va es eso que pasa mientras te trabas y no te entregas, prefiero amar y sufrir antes que no sentir nada, clavarme las espigas que cambie por espinas. Tengo bastantes vinos baratos para causar estragos con un par de tragos, empino botellas mientras deliro en el pensar divago entre las tinieblas volverte a encontrar criatura obscura que solo me llenas de insomios mambos, tengo un tango y ando un tanto gris, escuchando tronar mi corazón. Es una lastima que tanta estupidez me duela, el aspirar transmitiendo mierda solo te hace ahogar en más mierda. Hoy condenan a mis ganas preparandole una velada entre cortados silencios y una soledad incontenible, siempre pinta un te de lavanda para sanarse el corazón, suena esa pava zumbadora se agradecen también las brasas que arden para que las neuronas compesen ese arte de sacar todo lo malo para afuera. Mi llanto se volvio canción de invierno temblando entre tempanos de ilusiones que murieron para resucitar en primavera, la muerte que nacio en el abrazo, trajo el calor, siguio su rumbo el picaflor, buscando el nectar que sacie su sed